A propósito del cierre de la décima edición de la Feria Internacional del Libro de Venezuela (Filven 2014), el próximo 23 de marzo, te contamos sobre algunos beneficios que implica para el cerebro el hábito de la lectura.
Según Guillermo García Ribas, Coordinador del Grupo de Estudio de Conducta y Demencias de la Sociedad Española de Neurología (SEN), “la lectura es una de las actividades más beneficiosas para la salud, puesto que se ha demostrado que estimula la actividad cerebral y fortalece las conexiones neuronales”.
Cuando leemos obligamos a nuestro cerebro a pensar, a ejercitar la memoria y a imaginar
Un cerebro activo no solo realiza mejor sus funciones, sino que incrementa la rapidez de la respuesta. Mientras leemos, obligamos a nuestro cerebro a pensar, a ordenar ideas, a interrelacionar conceptos, a ejercitar la memoria y a imaginar, lo que permite mejorar nuestra capacidad intelectual estimulando nuestras neuronas.
Muchos han sido los estudios que han relacionado el nivel de lectura y escritura con un aumento de la reserva cognitiva, actividad de gran importancia por su relación directa con el buen funcionamiento cognitivo y ejecutivo de nuestro cerebro cuando envejecemos. También se ha demostrado que la reserva cognitiva protege ante los síntomas clínicos de las enfermedades neurodegenerativas.
“Se ha comprobado que cuanto mayor reserva cognitiva posee un individuo, mayor capacidad tiene su cerebro para compensar el daño cerebral generado por ciertas patologías”. Debido al envejecimiento progresivo de la población, en los próximos años, el número de afectados por demencia, principalmente alzhéimer crecerá exponencialmente. “Leer retarda y previene la pérdida de la memoria, por lo que permitiría retasar la aparición de estas enfermedades y reducir el número de casos”, concluye Guillermo García-Ribas.
Leer, sobre todo relatos de ficción, también puede ayudar a reducir el nivel de estrés, que es origen o factor de empeoramiento de muchas dolencias neurológicas como cefaleas, epilepsias o trastornos del sueño. Además, leer un poco antes de irnos a dormir, puede ayudar a desarrollar buenas rutinas de higiene de sueño.